LAS CARTAS OH, UNA AYUDA PARA ACCEDER AL SUBCONSCIENTE
Lo primero que debes hacer es sacar el polvo a tu sótano particular, limpiarlo y ordenarlo, y guardar únicamente aquello que te sea útil, que te haga sentir bien y en paz. Deja que se vaya lo que no quieras, agradeciendo lo que te aportó en su momento. Aunque fuera doloroso, seguro que fue una lección de vida.
Quizá te dé miedo bajar a tu sótano porque desconoces por completo con lo que te vas a encontrar, o quizá no sepas cómo hacerlo. Existe un método que te puede ayudar a dar ese paso y acceder fácilmente a tu subconsciente: la lectura terapéutica de cartas asociativas, las llamadas Cartas OH.
El primer mazo de Cartas OH fue creado por el artista mexicano Ely Raman en 1975 como un intento de llevar el arte al público en general, pero no fue hasta 1983 cuando el psicólogo alemán Moritz Egetmeyer las conoció e intuyó su utilidad como herramienta terapéutica para facilitar que sus pacientes pudieran exteriorizar su verdadero «yo» y sus auténticos sentimientos.
Su empleo en psicoterapia se basa en varias teorías, entre las que destacan los principios proyectistas del psicoanálisis y la «ley de figura y fondo» de la terapia Gestalt. También se apoya en otros conceptos, como los aportados por Donald Winnicott sobre el juego, o el principio de oposición causalidadsincronicidad de Carl Gustav Jung.
HERRAMIENTA EFICAZ
Las Cartas OH se han demostrado una herramienta muy eficaz en las consultas de psicología, psiquiatría y terapias naturales –donde siempre se tiene en cuenta el papel de la mente y el subconsciente–, pero también son útiles en el coaching personal y empresarial, en la pedagogía o en la creación artística.
Son útiles ante cualquier situación de conflicto interior, o como medio de autoconocimiento y de estímulo de la imaginación:
- Amplían nuestros puntos de vista.
- Descubren recursos propios que antes no se habían considerado.
- Liberan cargas emocionales
- Fomentan la capacidad de comunicación.
- Previenen y tratan enfermedades psicosomáticas.
- Detectan conflictos con nuestras relaciones y muestran alternativas.
- Provocan soluciones creativas a problemas complejos en grupos de trabajo.
- Estimulan la creatividad e imaginación en los niños para resolver sus problemas de forma sencilla y divertida.
¿CÓMO SE TRABAJA CON LAS CARTAS ASOCIATIVAS OH?
La baraja consta de dos mazos, en uno hay imágenes cotidianas (símbolos, paisajes, caras, personas, animales) y en otro están escritas distintas palabras.
Se escoge al azar una carta de cada mazo y se emparejan. Existen muchas maneras de «jugar» con las cartas, pero a menudo se forman seis parejas donde se va a proyectar la situación actual y dos más que serán resolutivas.
Las combinaciones de cartas se descubren poco a poco, a fin de que puedas sentir lo que te provocan.
Existen mazos diferentes con imágenes pensadas para trabajar las relaciones personales (Persona y Personita), con los niños (Morená), la relación con el entorno (Habitat) o la imaginación y la creatividad (Mythos, Saga, Ecco o Claro).
LAS CARTAS OH Y LAS EMOCIONES
Las cartas se llaman OH porque la exclamación «¡oh!» era frecuente debido al asombro que causaba ver el «mapa» del subconsciente y comprobar cómo ascendían mensajes desde el sótano emocional.
A veces el dolor reprimido es tan grande que no sabes cómo expresarlo. Es ahí donde este método tan sencillo puede ayudarte, porque provoca reacciones espontáneas que se saltan el filtro de la mente. Con ayuda del terapeuta puedes reconocer lo que te ha estado bloqueando y de esta manera comprender, aceptar y sanar los conflictos.
El paciente, cliente o usuario adquiere gracias a las cartas un mejor conocimiento de sí mismo, una mayor comprensión y capacidad para gestionar sus propias emociones.
Las Cartas OH ayudan a descubrir «el cómo, el porqué y el para qué» de nuestras actitudes. A partir de que la luz llega al sótano, ¡todo resulta más sencillo!